Pasillos vacíos, mesas sin niños y bolsas con material para trabajar a distancia. Así se vivió el regreso a clases en las escuelas privadas. Las envolturas negras llevan puesto el nombre de cada uno de los alumnos y las alumnas. Las nanitas estuvieron una semana entera entregando los paquetes a los respectivos padres y madres para arrancar el ciclo escolar en línea.
De nuevo a la espera.